Un finde Rural muy tranquilo!. Me gustó mucho la amabilidad que tiene Javier con sus alojados, es muy amable y simpático y te hace sentir como en casa. La habitación era super bonita, acogedora y tranquila. En la planta baja hay un salón con televisión, frigorífico y chimenea, una mesa familiar grande donde se puede comer y terraza para los fumadores.